Abandono de animales: A todos se nos viene a la mente la imagen de una familia suburbana de camino a unas vacaciones cutres, abriendo la puerta del coche lanzando al perrito (y al abuelo si se tercia) y continuando su camino tan felices mientras el animalito intenta inutilmente alcanzar el coche.
Gracias a numerosas campañas de concienciación, hoy en día casi todo el mundo rechaza este tipo de actos, casi todos estamos de acuerdo en que "jamás haríamos algo así ", pero lo que si se considera aceptable es llamar a una protectora o refugio y decir "no puedo tener más a mi perro o gato, llévatelo", las personas que hacen eso se consideran muy civilizados, piensan "que no los están abandonando". Nada más lejos de la realidad,
los animales entregados en perreras o refugios por sus dueños se consideran abandonados, en las perreras malviven hasta que son sacrificados y en los refugios muchos caen en depresiones al verse separados de todo lo que conocían.
Si bien es cierto que hay algunas circunstancias en la vida que pueden obligarte a separarte de tus seres queridos (animales y humanos), la mayoría de las personas que llaman a protectoras pidiendo que se les recojan a sus animales porque ya no los pueden tener, alegan unas razones muy pobres en la mayoría de los casos, que ocultan que en realidad les estorba su perro o gato y quieren deshacerse de él. Veamos algunas de las excusas más comunes que se suelen escuchar:
Me voy a otro país: prácticamente en todos los medios de transporte se puede viajar con animales, especialmente con los de tamaño pequeño, siguiendo unos protocolos veterinarios puedes trasladar a tu animal de un país a otro, pero como todo esto conlleva tiempo, molestias y dinero, es más cómodo deshacerse de él.
Me mudo y mi casero no quiere animales en la casa: y tanto trabajo te cuesta buscar un piso donde te los admitan?
Otra de mudanzas: me he mudado a un piso más pequeño y no puedo tener tantos animales: claro, claro, si cuando uno se va una casa más pequeña tira todos los
muebles que no caben.
Es que ya no puedo seguir atendiéndolo: cuándo se trata de un perro la traducción es:
es que se me ha pasado la novelería y me he dado cuenta que sacar al perro tres veces al día es un coñazo. Y si se trata de un gato ¿no tienes ni cinco minutos para limpiar la caja y llenarle el plato?, vamos, venga ya...
Está enfermo y ya no lo quiero : no piensas molestarte ni en cuidarlo ni en pagar su tratamiento (mejor no hacer comentarios).
Vamos a ser papás: y como el perrito o gatito ya no es necesario como sustituto emocional del bebé que no teníamos, se le da la patada y tan contentos....
Casi a diario se reciben en las protectoras llamadas de particulares que ya no quieren tener a sus animales, por supuesto con muchas prisas y exigencias, porque para eso están las perreras y las protectoras, no? Para que yo me deshaga de mis animales cuando me sobran.
De todo esto se saca la conclusión que todavía
falla la educación en cuanto a la tenencia responsable de animales, son vistos como objetos
de temporada que tienes cuando te vienen bien y te divierten y cuando empiezan a molestar hay que aparcar en algún sitio.
Habría que explicar a estas personas que cuando decides comprar o adoptar un animal de compañía, tienes que
atenderlo, quererlo y mantenerlo, durante un mínimo de diez o quince años, que
son tu responsabilidad, aunque te cambien las circunstancias, tengas problemas, menos tiempo o menos dinero, no son caprichos de un par de años y si alguna vez por razones insuperables te ves obligado a separarte de ellos es tu deber buscar durante el tiempo que sea necesario un hogar donde sea tan cuidado y querido como lo era contigo.
Si no entiendes esto, si no estás dispuesto a asumirlo, No eres la persona adecuada para tener un animal.